TUBERCULOSIS (SEGUNDA PARTE)

 Tenía diez años, ya para entonces debía ser asintomática y después de un año pinchándome me dieron por curada.Nunca se hablaba del tema salvo cuando había que rellenar una ficha médica.

Ni siquiera me planteé que en pleno siglo veinte pudiera ser mortal.

Con el tiempo me enteré que durante el Romanticismo estuvo bien visto ser tísico (con personajes que incluso se contagiaron a propósito) pero a raíz de que Koch descubriera el bacilo empezó a asociarse a la falta de higiene y desnutrición y ya perdió todo el glamour.En España la novela Pabellón de descanso de Cela llegó a estar censurada por la crudeza con que hablaba de la enfermedad.

Hay muchísima literatura sobre la tuberculosis, y muchísimos famosos, ilustres o no, que la padecieron.

Entre los musicos cabe destacar a Chopin por lo que de romántico tuvo que hiciera viajar a su corazón por media Europa hasta hacerlo descansar en Varsovia.(Por cierto, hubo un movimiento por hacerse con el para verificar si había muerto de tuberculosis o no).

En el mundo de las letras la lista es interminable pero de cultura general es que Dostowiesky, las tres hemanas Brontë, Bécquer, Sontag, Keets y Shelley la padecieron.

Con la poesía de Bécquer fue con la primera que me identifiqué, le entendía perfectamente; pero no fue hasta que en plena adolescencia leí La montaña mágica de Mann que lo vi claro.Hubo un antes y un después en mi modo de ver la vida.Siempre tuve tendencias dramáticas pero ese libro hizo estragos.Y no lo he visto claro hasta ahora.Ese fue el libro que hizo que pasara de las novelas de aventuras y misterio a los dramas realistas.

También fue mi primera ópera "La traviata" y creo que fui la única ,del grupo del instituto que fuímos al Liceo a verla,  que lloró. Con Domingo en el papel de Alfredo. (Aunque dudo en si fue Tosca mi primera ópera pero no tengo manera de comprobarlo, p*** memoria selectiva).

El drama de Violeta está basado en el de Marguerite Gautier de La dama de las Camelias  de Dumas. Y a ellas también las entendí y yo amaba como ellas amaban, o sea, hasta las trancas.

Eso sí, me parecía tan enfermizo que intentaba disimularlo.Y mis valores eran los del romanticismo y sufría y pensaba en el suicidio.Total, que era una intensa.Y mi madre solo hacía que decirme:-Solo te deso que tengas una hija que te dé la guerra que tú das.

Así que desde la niña que muere en La cabaña del tío Tom hasta la Mimí de Moulin rouge pasando por la Susana de El embrujo de Shangai las tuberculosas siempre han tenido fama de hacer lo que les daba la gana(con ese componente sexual de liberación por la muerte cercana)y tener siempre las mejillas arreboladas.

Y es ahora cuando me doy cuenta que siempre he ido a pecho descubierto(literal y metafóricamente) y al ser asintomática no me subía la fiebre pero me gusta pensar que la tenía, siempre me han llamado la atención por ir poco abrigada, sobre todo si nieva, pero es que la euforia que me produce la nieve me calienta lo suficiente.

Y si fuera socióloga haría un estudio sobre la influencia de la tuberculosis sobre la creatividad, o sobre la manera de sobrellevar el dolor o sobre ...pues todo lo que se os ocurra ya está hecho y estudiado así que lo dejo en una entrada del blog que he reescrito tres veces para desdramatizar.