domingo, 11 de diciembre de 2022

LECTURAS DEL VERANO PASADO

 Una vez en Europa. De John Berger.Es el segundo tomo de una trilogía pero  se pueden leer separadas porque son compilaciones de retratos.En éste volumen son historias de amor relacionadas con el entorno rural y su evolución.Me ha gustado.

Autobiografía de mi madre.Por Jamaica Kincaid.Es de esos libros que compro por la portada(de hecho lo compré dos veces antes de leerlo, estoy fatal de lo mío).La autora ha sido candidata al Nobel y la historia debe tener mucho de real por cruda.En la línea de "El color púrpura" pero menos intensa.

Historia de Shuggie Bain de Douglas Stuart.Una primera novela que ganó el premio Booker.Desgarradora por la autenticidad de sus protagonistas, madre e hijo en el Glasgow de los ochenta.

Purgatorio de Jon Sistiaga.Cualquiera que haya seguido la trayectoria de éste periodista sabe de qué va.Entretenida y bastante realista si no objetiva.Conflicto vasco y heridas abiertas.

El festín del amor de Charles Baxter.Creo que hicieron una peli pero no la he visto.Originalísimas y dispares historias de amor sutilmente entrelazadas.

Los inquietos de Linn Ullmann.Para mitómanos.La escribe la hija de Ingmar Bergman y Liv Ullmann.No debió ser fácil para ella.Autobiográfica.

Contadme que habéis leído vosotros.En otoño me compré tres recomendaciones vuestras pero no me voy a adelantar que si no me quedo sin entrada trimestral.Tremenda mi flojera.




miércoles, 16 de noviembre de 2022

LOS DIECISEIS DE MI CHURUMBEL

 Los cumplió en marzo y uno de los regalos que le hice fueron todas las entradas de churumbeladas que había escrito aquí a lo largo de los últimos doce años impresas ya que ella no lee el blog.
Y al leérselas en voz alta por las noches cuando se acuesta (siiii, en modo bebé)me he dado cuenta de la cantidad de faltas que tienen y que debería corregir pero eso para cuando cumpla dieciocho y se las imprima en tapa dura.

Pero a lo que iba, yo creía que habíamos sorteado la adolescencia sin grandes traumas por aquello de que la pandemia la había encerrado en casa en el peor momento pero no, así como fue tardía con los dientes pese a su tamaño y madurez también lo ha sido con el pavo.
Es verdad que medía metro setenta y no tenía la regla hasta los quince pero yo las navidades pasadas tenía una niña que iba con sudaderas extragrandes y vaqueros anchos, que se pasó las segundas navidades encerrada, tirada en un sofá viendo vídeos de tontadas, cocina y demás y que no quería saltarse las restricciones para quedar con sus amigos.
 
Y de repente, cumplió dieciséis y me dijo que lo iba a celebrar yendo a la discoteca que ya podía entrar aunque no beber alcohol.Y aquí llegó mi sorpresa porque para el evento se disfrazó de adolescente al uso, 
estuvimos dos semanas intentando encontrar algo que pudiera llevar para que la dejaran pasar porque, y aquí da para otra entrada, el mundo de la noche sigue siendo sexista donde los haya y la etiqueta de las discotecas es tremenda y como para negarse a ir pero desde luego ella ya me dejó claro que no iba a luchar
contra el derecho de admisión del lugar, quería ir y si hacía falta ponerse una disfraz de puta(llámame antigüa) aunque fuera prestado lo haría.Fue con sus amigas con las que encontró el disfraz y le dejaron los complementos porque ella no estaba dispuesta a comprarse ni bolso ni Converse que no usa para una noche que iba a salir.(Hay otra discoteca que pide Marteen's a las chicas y prohibidas Air Force a los chicos, muuuuuy fuerte).

Al final acabé comprándole yo unas Converse porque la tercera noche que salió con unas prestadas dos números menos volvió con los pies "destrozaos".

Y mi pena es que ya no ha habido vuelta atrás, sigue saliendo con ropa prestada porque no acaba de ser su estilo, de hecho lleva minifaldas pero no se depila las piernas, tampoco se maquilla pero ya ha empezado a pintarse las uñas.

A lo que iba, me ha llevado seis meses asumir que el ocio ha cambiado.Pese a que nosotras vivimos en un pueblo pegado a Barcelona ellos no quedan y salen de tarde, se han saltado lo de echar la tarde comiendo pipas y compartiendo litrona.Solo va al cine conmigo.El hecho de que no puedan consumir en los bares hace que el botellón, antes de entrar en la discoteca ,sea con alcoholes duros para entrar suficiente "entonao" para aguantar las cuatro horas dentro sin siquiera gastar la consumición esperando conocer a alguien de dieciocho que se las pida y les inspire la suficiente confianza de que no les va a echar nada raro dentro.(Ya le he dicho que al menos pida un agua para no deshidratarse saltando, porque tampoco bailan, entre una marabunta de cuerpos sudados que estoy convencida supera el aforo todas las noches).
 
-Ir a la disco antes de la una es de "pringaos" mamá.
Con lo cual, y eso tampoco se estilaba en mi juventud, los padres de las chicas nos organizamos para llevarlas unos y recogerlas otros.Y digo de las chicas porque los chicos van en transporte público y se quedan hasta las seis de la mañana para volver en transporte público.Y aquí si hablo por todos los padres de su grupo, nosotros no estamos preparados para dejarlas ir con esas pintas y a esas horas ni en tren(porque por supuesto la discoteca de moda ,una vez se han estrenado en la de al lado de casa, es la del polígono de un pueblo a cuarenta kilómetros de casa), ni en bus ni Cabify o similar.
 
Y si a esto le añades que ha empezado a mirarme como si yo fuera la persona más tonta del mundo porque no soy lo suficientemente rápida con la trigonometría , que le supera tener que repetirme las cosas (con la medicación he perdido bastante oído izquierdo y no siempre la tengo a mi derecha) y que ya sabe más inglés que yo y que mis comentarios le parecen muy de "boomer" pues tenemos ratos malos.

En su defensa diré que al vivir las dos solas su sentido de la supervivencia le hace aflojar y no es rencorosa.Y en la mía que yo me acuerdo perfectamente de mi adolescencia y que mi madre siempre
me decía .-Espero que tengas una hija que te dé la mitad de la mitad de la guerra que tú has dado.
Y ni por asomo(no cantaré victoria hasta que cumpla ¿cuántos?¿veinticinco?).
 
La noche del 31 de octubre, todos los santos, yo estaba fuera y me dijo que se iba a disfrazar de "Jack Sparrow", ahí lo dejo que cuando vi la foto le dije:-al menos te habrás puesto parche...por tapar algo.
 

Y en esas estamos, ¿que tal vosotros con lo vuestro?


 

martes, 2 de agosto de 2022

LEÍDO EN EL INVIERNO 2021-2022 Y LA PRIMAVERA SIGUIENTE.

 

Así que como no se me ocurre nada alegre voy a enumerar lo leído y ya.
Por actualizar.
 
Terra Alta de Javier Cercas.Una novela policíaca entretenida sin más.No me gusta especialmente el género pero cuando no estoy muy fina me da por ahí.
 
Joe de Larry Brown.La editorial "Dirty works" ha sido un descubrimiento.He de decir que a mi me da por las editoriales más que por autores.Y la temática Norteamerica profunda con sus personajes me tira mucho.Me ha gustado.
 
Érase un río de Bonnie Jo Campbell.De la misma editorial.La vida de la autora es mucho más interesante que la de la protagonista pero me fascina lo atractivo que me resulta un personaje tan opuesto a lo que la literatura comercial nos tiene acostumbrados, por distinto a la par que real.Es como cuando ves la película
"Tres anuncios en las afueras" y sabes que pese a que todo parece surrealista es así y sobre todo la naturalidad con que todo el mundo se lo toma todo por muy tremendo que sea.
 
Los vencejos de Fernando Aramburu.Después de Patria si tenía que repetir con el autor pero con tiempo de por medio.No me ha decepcionado pero no tiene nada que ver con lo que esperaba.Otro protagonista que no cae bien por lo real.Repetiré autor.

Puerto escondido de María Oruña.Ésta novela negra solo me generó interés porque se sucede en Cantabria
y me gusta conocer el paisaje.Prescindible.

Inés y la alegría de Almudena Grandes.Es el único que tenían en la biblioteca cuando murió que no hubiera leído pero me hizo recordar por qué no leí mas que la mitad de la serie Episodios de una Guerra Interminable.

Operación masacre de Rodolfo Wash.No sé ni cómo ni porqué me leí éste libro que se considera la primera novela de no ficción periodística.Muy tremendo como tantas burradas que se vivieron en los cincuenta en los alrededores de Buenos Aires.

Olive Kitteridge de Elizabeth Strout.Lo tenía pendiente desde que descubrí a ésta autora.Se que han hecho una miniserie y por eso quizás lo hayan vuelto a editar.Fue premio Pulitzer y para mi eso es una garantía de que me gustará.Son como historias que en cine calificaríamos de "independiente".

Adiós fantasmas de Nadia Terranova.Que sea un libro del asteroide también me presupone garantía de éxito.Reencuentro de una madre y una hija en una decadente casa de Messina.Decadente.

Yo, Julia.De Santiago Posteguillo.Le comenté a Pilar que "Africanus" me dejó fría y me dijo que le diera una segunda oportunidad al autor con éste por aquello de que la protagonista era mujer.No le voy a dar una tercera oportunidad.A mi no me aporta nada.

Q road.de Bonnie Jo Campbell.La editorial Dirty Works me ha enganchado.Y resulta que éste es una segunda parte de "Erase un río" aunque se pueden leer solas y sin orden.Es la Norteamérica profunda y un personaje femenino totalmente atípico como lo fue en el anterior libro su madre.

Del color de la leche de Nell Leyshon.Lo cogí porque había sido premio libreros de Madrid en el 2014 y eso también me presupone garantía de éxito.
Es cortito y se lee en un rato, algo previsible pero podría ser una historia real.Para los románticos que creemos que no se puede vivir sin leer.

El sanador de caballos de Gonzalo Giner.Lo compré deprisa y corriendo porque tenía un vuelo larguísimo por delante y nada para leer y menuda decepción, es como un corta y pega de muchos libros sobre médicos, judíos e historias romances varias pero con un futuro veterinario especializado en caballos.
Solo me leí cuatrocientas de las ochocientas páginas que tiene y lo voy a dejar en la esquina de mi pueblo donde se dejan libros que estoy convencida nadie quiere.

Para mi cincuenta y siete cumpleaños me regalaron el "kindle" ya que ahora  no puedo cargar peso en mis viajes y en libros y zapatos he reducido un montón( he dejado también los taconazos aunque todavía no he llegado al despropósito de viajar solo con deportivas...pero todo se andará).
Pero no me gusta y leo muchísimo menos, quizás porque tampoco acierto con lo que escojo.
Estos son los que he leído:

Eramos unos niños de Patti Smith.Me lo recomendó Steppenwolf y me ha resultado curiosísimo no saber que la cantante mantuvo una relación con Mapplethorpe, muy interesante.

Así de grande de Edna Ferber.Premio Pulitzer en 1925 es la historia de una mujer que sacrifica su vida para realizarse en la de su hijo, muy realista a la par que incomprensible en ocasiones.

Los días perfectos de Jacobo Bergarache.Una novela que podría considerarse epistolar un tanto atípica pero original sobre la infidelidad y el dejarlo en el momento justo por lo que pudo haber sido y no vaya a ser.

He de combinar el papel cuando estoy en casa y el electrónico cuando viajo porque si no está visto que leo mucho menos.
Y hasta aquí por hoy.Se ruegan recomendaciones (luego ya veré si hago uso de ellas).
Besos y por la sombra...




jueves, 3 de marzo de 2022

DÍA DE SAN VALENTÍN

 No caigo en la cuenta que solo voy a estar libre en New York la tarde de la súper-bowl y el día de San Valentín.

Aquí no hubiera tenido mayor importancia pero para quedar con americanos de clase media, sin previo aviso, es harto arduo.La tarde del domingo todo el mundo ha quedado para el evento (de todos los cantantes del intermedio de éste año solo conozco a dos, mi hija al resto) y el lunes no hay mesas ni para comer ni cenar sin cita previa.
Así que paso la tarde del domingo en el hotel, los -8ºC del exterior no invitan a salir a pasear y el lunes con "jet lag" y sin desayuno en el hotel (el problema del servicio en EEUU desde la pandemia es digno 
de un estudio aparte)espero hasta mediodía a que la temperatura suba a -3ºC para salir  hacia el Soho con un huevo duro y una barrita de cereales en el cuerpo.
A las tres de la tarde después de no entrar en calor comiendo en Baltazhar (pijísimo pero con corrientes de aire, nos han dado la única mesa que tenían vacía porque nadie la reserva y ahora ya sabemos por qué) decido ir a un centro comercial al otro lado del río, allí no cobran tasas porque ya es New Jersey y son tiendas tipo "outlet", y así mi prima podrá venir a verme al salir del trabajo y antes de la cena de San Valentín(que insiste comparta con ella y su marido) ya que ella vive en ese estado, el de los Bruces (Springsteen y Willis) y a los cuales he tenido el gusto de tropezarme pero eso daría para otra entrada.

La manera más rápida y barata es ir en un "bus" que cuesta seis dólares y sale de la central de autobuses y llega directo al centro comercial pero ¡ay!, pierdo el último que salía a las cuatro y media y ahí empieza la Odisea.

LLamo a mi prima y no tiene ni idea de transportes públicos, el Uber me cuesta cincuenta dólares y me parece un exceso, así que pregunto en información otra combinación para llegar a Jersey Gardens Mall, me la dan por escrito y con ella camino quince minutos por el subterráneo de la central de autobuses hasta llegar a la puerta indicada.
Una vez allí, error número uno, no me fijo en la hora que me han dado por escrito pero si en el destino del autobús y con la hoja en la mano le pregunto si es el correcto al conductor, error número dos, me dice que es directo pero me hace un gesto con la cabeza de que pase y arranca.
Cuando voy a sentarme me doy cuenta de que no quepo porque hay personas que ocupan dos asientos con sus bolsas, su envergadura o su mala educación.Soy la única blanca, son todos negros menos el maleducado oriental que ocupa dos asientos porque su postura se lo permite.Veinte minutos más tarde me
da la sensación de que se ha pasado el desvío para coger la autopista al "mall", me empiezan a entrar los calores y alucino de que nadie se haya quitado el chaquetón, ni la bufanda ni el gorro.Yo me quito todo(el plumas ese finito que llevamos cuando la temperatura baja de cero y el abrigo, gorro y bufanda no uso).

Diez minutos más tarde y en plena "rush hour" me empiezo a marear y decido sentarme, me voy a la fila de los malotes y una señora tiene la ambilidad de ocupar un solo asiento para dejarme hueco.

Cuando el autobús llega al único destino  y se baja todo el mundo, me dirijo al conductor a pedirle explicaciones y me dice que yo solo le he preguntado si ese era el autobús, que me baje y coja, en el otro lado del mini edificio que es la terminal, un autobús de vuelta.Flipo en colores pero no puedo discutir con un negro de metro ochenta malencarado en un idioma que no es el mío.

Me bajo, la estación se llama Irvington y según entro sé que estoy totalmente fuera de lugar, de hecho hay una especie de mujer agente de seguridad que sin levantarse del tabuerete me pregunta si tengo algún problema; se lo cuento y me indica una garita donde hay un indio detrás de un cristal blindado que me venderá un billete si le pago en efectivo, o una bolsa de patatas sabor bacon, puedo escoger.Compro el billete y me siento a esperar con el bolso de mis medicinas agarrado porque en ello si me va la vida, estoy dispuesta a darle el teléfono o la cartera al primero que me lo pida pero mi inhalador eléctrico y los antibióticos no.

LLamo a mi prima, me dice que no me mueva que va a buscar a su marido y vienen a por mi, que no podía estar en peor barrio en mil millas a la redonda y que no me separe de la que parece de seguridad.
Le insinúo que ya tengo billete para volver y que ahora ya sé el autobús no exprés que debo coger y me repite que si no he entendido que está anocheciendo y eso es Irvington, New Jersey.(Es una exagerada, luego miré en internet y en esa población solo se comete un crimen cada cinco horas y diecinueve minutos, miden los crimenes como nosotros el covid , un 31 por cada 1000 hab y el asentamiento de la estación salía en rojo oscuro en todos los mapas de peligrosidad).

Me siento a esperarla, son unos asientos en círculo en medio de la mini terminaly hay entradas de la calle por los cuatro costados.Lo que allí observé en la media hora que tardaron en venir a por mi fue:
- un "dealer" vestido con toda la ropa que a mi hija hubiera hecho feliz (rollo rapero negro pero no muy "cani") que se bajó de su súper 4x 4 entró al baño después que su cliente y salió antes.
-Una madre o abuela con un niño de seis años al que le dió una bolsa con pollo frito mientras esperábamos.
-Cuatro desdentados alcohólicos que estaban allí para no pasar frío.
-Una yonqui desquiciada que salía, daba vueltas a la estación chillando sabediosqué y entraba lo justo para entrar en calor y así una vez tras otra hasta que desapareció.
-Una madre, o abuela, con un niño de tres años que se le escapó su globo de San Valentín y se quedó pegado al techo.Y ahí empezó la función de verdad, porque se movilizaron todos para recuperarlo.

Es indescriptible el circo de desharrapados subidos unos encima de otros, con un palo de fregona del baño
que hizo que yo me levantara porque si no, me daban o se me caían encima, todos hablando a la vez, uno de los desdentados intentando que la madre que había olvidado su teléfono le hiciera caso para devolvérselo, mientras el resto segía subiéndose por los asientos, a caballo uno de otro.Era para filmarlo pero no me atreví.

Y la de seguridad sin inmutarse, era tan surrealista que en un momento dado hasta intervine, les dije que llamaran a un señor muuuuy alto que estaba fuera esperando el autobús y eso hicieron y cuando éste entró y le expliqué lo que no era capaz de entender por boca de los alcohólicos me llamó mi prima, para que saliera porque ella no iba a bajar y su marido estaba apretando el acelerador para huir de allí en cuanto yo subiera.

A todo esto ya hacía rato que  tenía que haber hecho mis inhalaciones de antibiótico, así que me puse a ello sin dilación, sin apenas saludarles, solo atiné a disculparme por haberles hecho desplazarse a un lugar al que jamás hubieran ido por propia voluntad.

Para atinar con la jeringuilla tuve que encender la luz pero también es verdad que lo de inhalar de una pipa como si fuera "crack" en ese barrio no iba a llamar la atención.
Mi prima insistió en llevarme al centro comercial pese a que yo tenía suficiente con la experiencia vivida y para cuando llegamos yo acababa las inhalaciones y no me quedaban ganas de discutir.Total, solo había encontrado resreva para tres a las nueve de la noche y nos quedaban un par de horas.

Mi intención era comprarle algo a mi churumbel, que éste mes cumple dieciséis y cualquier cosa norteamericana le hace ilusión.Pues nos bajaron el cierre en las narices, una tienda tras otra, pero solo a las que queríamos ir, el resto permanecían abiertas.Son esas casualidades de cuando tienes un mal día.Que se juntan los astros para empeorarlo.
Y me he acordado hoy porque ayer tuve otro día de esos, que lo peor que puedes decir es .-¿Qué más puede pasar?...porque pasa.Y eso también daría para otra entrada.
 
 
 
 

 
 Y éste fue mi regalo de San Valentín, que mi prima es muy detallista y también me trajo una sudadera de la universidad donde yo pasé un verano allá en los ochenta que a mi hija le valdrá como regalo de los "states".
Y la noche dió para más pero ya me ha quedado muy larga la entrada así que otra vez será.
Besos y si hay alguien que celebrara semejante fecha...solo puedo decir que ...ni tan mal.


 

 

 

miércoles, 12 de enero de 2022

LECTURAS OTOÑO 2021

 Un día en la vida de una mujer sonriente de Margaret Drabble.Son unos relatos muy bien escritos.Repetiré con la autora.Y he descubierto la palabra lítote (otra cosa es que olvide su significado en breve).

 Doctor Arrowsmith de Sinclair Lewis, premio Nobel de literatura en 1930.Creo que Nórdica ha decidido reeditarlo en plena pandemia con vista.Una visión muy realista, quizás demasiado cínica y un punto caricaturesca del mundo médico y farmacéutico del momento en que lo escribió.Da qué pensar pero un poco densa para el lector medio.

Los ojos cerrados  de Edurne Portela y Humo  de José Ovejero.A mi me pareció gracioso leerlos seguidos ya que los autores son pareja y los escribieron a la par.Ambos son cortitos y en ambos el decorado es agobiante hasta para los que les gusta la soledad del campo.El de él mucho más crudo.Desasosegantes pero bien escritos ambos.

Desayuno en Tiffany's  de Truman Capote.Después de leerlo entiendes perfectamente que el autor se cogiera tremendo cabreo al ver la película, cualquier parecido es pura coincidencia.Ésta historia es mucho más real, cruda y buena.Todos los matices de la enfermedad mental de ella hacen que me vuelva a maravillar las dotes de observación del autor hacia sus semejantes(lo que ya había constatado con A sangre fría).

El juego de la sombra de Louise Erdrich.Desde que Manuel Rivas me recomendó a ésta autora, siempre que encuentro algo de ella lo compro.Es distinta, original.Muy bien relatada una frustrante relación de pareja y con el transfondo de la cultura amerindia que siempre le da, a mis ojos, una toque de exotismo.

Made in Spain  de James Rhodes es un a oda a nuestro país y una explicación del "embolao" en el que se metió su autor con nuestros políticos.A mi me maravilla la positividad del personaje pero si no habéis leído nada de él hay que empezar por Instrumental donde cuenta los abusos que sufrió de niño y cómo la música consiguió ayudarle a salir del pozo.Luego si el personaje os engancha(es de los pocos que sigo en Instagram, ya que intento seguir solo a aquellos que  suman) ya podéis leer éste.

Tres nits de torb i un cap d'any de Jordi Cruz.Éste me lo prestó mi amigo el bombero cuando me hospitalizaron a domicilio y me quedé corta de lectura.Trata sobre la cantidad anómala de muertos que hubo en diciembre del dos mil en el Pirineo catalán y la explicación metereólogica del suceso.Para amantes de la montaña y/o de sucesos trágicos.Me quedo con el concepto de el daño que ha hecho el fenómeno "Quechua" y Kilian Jornet a la hora de masificar la alta montaña con poco "seny".(Daría para otra entrada).



En otoño también tuve la oportunidad de comer grillos, mucho más ricos que las hormigas...donde va a parar....

Y si se os ocurre algún libro para recomendar se admiten sugerencias.