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Ayer discutíamos cuatro chicas y dos chicos sobre la prostitución en España.
Ellas, no acaban de creerse que haya tanta ni acaban de entenderlo, ellos en ningún momento lo dudaron.
En "la Vanguardia" he leido, a raíz de las detenciones en Tarragona, que, después de el tráfico de armas(que seguro que ellas tampoco visualizan), la prostitución es el negocio más lucrativo del país.
Las cifras:quince millones de hombres contratan los servicios de prostitutas al año.Estos gastan, según el gobierno, cincuenta millones de euros diarios.
Yo no estoy en contra de la prostitución, lo mismo que con la droga, el problema está en los intermediarios.Pero ambos problemas tienen mala solución.
Las que lo hacen porque les parece dinero fácil son las menos, pero las hay, suelen ser las de superlujo, niñas bien que sus padres no les dan los treinta mil euros mensuales que les "hacen falta" para llevar el ritmo de vida que sus papás no les acaban de dar, pero eso sí, les deben haber dado una educación.....
Todas conocemos alguna trepa o incluso varias que no han dudado en ejercer sus armas de mujer para conseguir un puesto más allá de sus posibilidades, o aún valiendo, las han usado porque si no no lo hubieran conseguido en la vida porque ellos son así de machistas.
Y digo yo ¿porqué no se lían con los controladores de vuelo?.Claro que ahora ya no, con solo doscientas mil por treinta y cinco horas semanales, van a empezar a tener que tirar de moteles de carretera.
Y ahí es donde está el negocio, en la trata de mujeres.Y que yo sepa, todos los municipios saben dónde y en qué condiciones se encuentran esas mujeres, así que no debe ser fácil, o todo el mundo está "pringao" o tienen miedo de lo que harían los quince millones de hombres que dicen usar ese tipo de servicios sin saber dónde acudir a desquitarse.
Y todo esto con la libertad sexual actual y con más mujeres que hombres dispuestas a emparejarse.
¿Es un problema de comunicación?.
En las clases altas con cierta obsoleta educación y más de cuarenta años, yo he oido comentarios del tipo:-Yo a mi mujer hay cosas que no osaría pedirle.O a ellas:-¿Qué le chupe qué?, -¿Qué me la meta por dónde?.
Estos ya tenían un problema de base.
En las clases medias las separaciones salen muy caras y cuando ya han pasado los años de hacer esfuerzos por agradar al contrario ellas prefieren hacerse las suecas pero que las dejen en paz y ellos tiran por el camino fácil, nada de cenitas románticas, ni buena conversación...al grano.
Eso sí, ninguuuno de mis conocidos ha hecho uso de estos servicios, a los jugadores de deportes en equipo sieeeempre les engañan en las concentraciones con las edades de las seguidoras solícitas y ningún concejal de este país cobra por nada relacionado con el tema.
Lo de la Campbell con los diamantes de sangre no sé si aquí cuadra.
Hola! Uff…cuantos temas has tocado, el eterno problema no resuelto aún en ningún lugar!!. Es cierto que, aunque sea legal la prostitución en nuestro país, no lo es la “esclavitud sexual” o “trata de blancas”. Aquí se cerrarán los ojos y algunos estarán “pringaos” como dices y, en otros casos, no existirán las suficientes pruebas o las mujeres no se atreverán a denunciar por miedo, por lo que no es posible actuar contra las mafias. Legalizando o ilegalizando la prostitución, las mafias continuarán funcionando porque seguirá habiendo demanda de servicios sexuales.
ResponderEliminarCuando escribes: “Y todo esto con la libertad sexual actual y con más mujeres que hombres dispuestas a emparejarse”. ¿Hablas de “emparejarse” tener únicamente sexo? ¿O emparejarse conllevaría algo más? Si es sólo sexo, y con más mujeres que hombres dispuestas a ello, seguramente disminuirían drásticamente las visitas de los hombres a las prostitutas.
Y te doy la razón cuando insinúas esa hipocresía. Yo tampoco tengo ningún conocido que reconozca ha hecho uso de esos servicios, salvo los sondistas con los que he trabajado en muchas ocasiones.
No creo que haya problema de comunicación. Seguramente habrá muchas mujeres que les resulte muy fácil pasar una noche con cualquier chico que conozcan y, en cambio, cada vez proliferan más y hay más mujeres que acuden a los servicios de gigolós….jaja y no creo que sea para cena romántica o conversaciones interesantes!!
Aunque no estoy de acuerdo del todo con la conocida frase: “el mundo se mueve por la peseta y por la bragueta”, a veces se le parece. Pero aquí te copio ese comentario de tu escrito anterior que amplío: Y sobre todo, a las madres de los chicos (y los padres de las chicas), educarlos como os gustaría que fueran las parejas de vuestras hijas (y las parejas de vuestros hijos). Besos!!
Un cliente entra en un club. Las chicas son extranjeras (pero no estadounidenses, ni alemanas, ni británicas). Las condiciones de trabajo, evidentes. Pero, claro, él es tan "ingenuo" y tan "inocente" que ni de lejos se imagina que están explotando a esas personas y que él es el último eslabón de la cadena (o el primero, según se mire). Francamente, me resulta muy difícil creer en la "ingenuidad" de este cliente.
ResponderEliminarBesos
Rober:La diferencia entre los gigolós y las prostitutas es que difícilmente ellos lo harán obligados, entre otras cosas porque es físicamente imposible.
ResponderEliminarA mi me consta que tu eres de los "atípicos"pero parate a pensar en lo que ves a tu alrededor.
Desde luego, yo la educación de mi hija me la tomo muy en serio, a lo mejor acabo claudicando y comprándole la Barbie pero de momento he claudicado yo a favor de los pantalones porque es de lo bueno de los chicos, al menos así no se despelleja las rodillas(ha sido su razón de peso para que no la vuelva a obligar a ponerse vestido).
Maria:Me fascina la facilidad de la gente para obviar lo evidente, siempre a su favor, claro.